Salmos 112:1-3 y 6-7 “Bienaventurado el hombre que TEME A JEHOVÁ, Y en sus MANDAMIENTOS SE DELEITA en gran manera. Su descendencia será poderosa en la tierra; La generación de los rectos será bendita. 3 Bienes y riquezas hay en su casa, Y su justicia permanece para siempre. Por lo cual no resbalará jamás; En memoria eterna será el justo. 7 No tendrá temor de malas noticias; Su corazón está firme, confiado en Jehová.”
DEVOCIONAL POR JANETHE DISLA
CAMINANDO EN LA VERDAD
Hoy 14 de julio
SALMOS Capítulos 108-118
En estos capítulos vemos: David alaba a Dios por su soberanía sobre las Naciones; Oración por juicio sobre los impíos; Exhortación para confiar en el Dios Viviente y no en los ídolos; y Alabanza por Liberación de la muerte.
Meditamos hoy en Salmos 112:1-3 y 6-7 “Bienaventurado el hombre que teme a Jehová, Y en sus mandamientos se deleita en gran manera. Su descendencia será poderosa en la tierra; La generación de los rectos será bendita. 3 Bienes y riquezas hay en su casa, Y su justicia permanece para siempre. Por lo cual no resbalará jamás; En memoria eterna será el justo. 7 No tendrá temor de malas noticias; Su corazón está firme, confiado en Jehová.”
El Temor Reverencial al Dios Viviente, crea un Amor por Él, lo cual nos inspira a deleitarnos en sus mandamientos y a rechazar todo lo malo, todo aquello que nos aparte de su santidad. Es una actitud de Admiración y Reverencia hacia el Dios Eterno, esto profundiza nuestra humildad y nos lleva a ver, cuán inmerecedores somos de su Amor.
Las Palabras del Temor a Dios, caracterizan a los Profetas del Antiguo Testamento; y este Temor a Dios, es el fundamento de la vida más abundante del Nuevo Testamento. Es una de las grandes promesas profetizadas por el Profeta Jeremías 32:40, que dice “ Y haré con ellos pacto eterno, que no me volveré atrás de hacerles bien, y pondré mi temor en el corazón de ellos, para que no se aparten de mí”.
Un Temor Reverencial a Dios, es el resultado de Caminar en Su Verdad: Leemos en Salmos 86:11 ”Enséñame, oh Jehová, tu camino; caminaré yo en tu verdad; Afirma mi corazón para que tema tu nombre”.
¿Te has dado cuenta que estamos viviendo en tiempos donde no hay Temor a Dios?, Los chicos no tienen temor a Dios, no tienen Temor a los Padres, a las Autoridades, a los Maestros; ¿estás viendo que está pasando en el mundo?. Mira a tu alrededor, los chiquillos, los jóvenes, están creciendo sin Temor a Dios. Pero sobre todo las autoridades no tienen temor a Dios tampoco; ¿Cómo se va a enseñar algo que no tenemos?
Cuando se quita el temor a Dios, se quita el fundamento de vida y todo se desmorona y corrompe. No hay temor a Dios, ni a los padres, ni a ninguna autoridad. Cada uno sigue el consejo de su pensamiento pecaminoso. Ni siquiera ya pueden distinguir la identidad del ser humano entre un hombre y una mujer; porque no hay temor a Dios, se está distorsionando la esencia humana. Dios tenga misericordia de nosotros para abrir los ojos y volver al Dios de nuestros Padres.
Debemos volver al Dios de la Biblia, al único que debemos TEMER, ya que Jesucristo no los dijo en Lucas 12:5 Pero os enseñaré a quién debéis temer: Temed a aquel que después de haber quitado la vida, tiene poder de echar en el infierno; sí, os digo, a éste temed.Por nuestro bien,es preciso Temer a nuestro Creador Poderoso.
Otra realidad de los que no temen al Dios Omnipotente es que han creado sus dioses particularmente, para su propia perdición. Leemos Salmos 115: 3-9 “Nuestro Dios está en los cielos; Todo lo que quiso ha hecho. 4 Los ídolos de ellos son plata y oro, Obra de manos de hombres. 5 Tienen boca, mas no hablan; Tienen ojos, mas no ven; 6 Orejas tienen, mas no oyen; Tienen narices, mas no huelen; 7 Manos tienen, mas no palpan; Tienen pies, mas no andan; No hablan con su garganta. 8 Semejantes a ellos son los que los hacen, Y cualquiera que confía en ellos.”
No debemos sustituir al Dios Viviente Jesucristo por ídolos mudos, es abominación a nuestro Dios. Los ídolos mudos, cualquiera sea su nombre, son pura ilusión de tu mente y no pueden darte vida Espiritual, ni librarte del infierno eterno. Temamos a nuestro al Eterno Dios porque Él es Santo, Santo, Santo; el Da la vida y el la quita. Nosotros no podemos hacer nada, ni nadie hay que te de vida después de la muerte.
Así que esta reverencia a Dios, es una parte esencial de la vida de un hijo de Dios, que complace a su Señor y Redentor. Tengamos TEMOR al DIOS SANTO, SANTO, SANTO, porque un día, tendremos que dar cuenta de nuestras actitudes, aún de las intenciones de nuestro corazón. Nos dice: Salmos 118: 24-26 y 28-29 “Este es el día que hizo Jehová; Nos gozaremos y alegraremos en él. 25 Oh Jehová, sálvanos ahora, te ruego; Te ruego, oh Jehová, que nos hagas prosperar ahora. 26 Bendito el que viene en el nombre de Jehová; Desde la casa de Jehová os bendecimos. Mi Dios eres tú, y te alabaré; Dios mío, te exaltaré. 29 Alabad a Jehová, porque él es bueno; Porque para siempre es su misericordia.”
Si no tienes seguridad de donde pasaras la eternidad, te invitamos a que recibas la vida abundante que solo Jesucristo nos da cuando humillados ante su SANTA PRESENCIA nos arrepentimos de nuestro pecado. Ora conmigo. ¡Padre Eterno he entendido que soy pecador, y que Jesucristo tomó mi lugar en la cruz del calvario, me arrepiento y te pido perdón por todas las ofensas y recibo a Jesucristo como mi Señor y Salvador de mi vida, límpiame y lávame con tu sangre preciosa te entrego todo lo que soy para que a partir de hoy vivió en obediencia a tu palabra. En el nombre de Jesucristo mi amado salvador. Amen ¡Si has orado así ya estás en la familia del Dios Viviente! Hay fiesta en el cielo cuando un pecador se arrepiente.
Recuerda: ¡El TEMOR A DIOS NOS LIBRA DE PECAR CONTRA EL!