
9 Pero había un hombre llamado Simón, que antes ejercía la magia en aquella ciudad, y había engañado a la gente de Samaria, haciéndose pasar por algún grande. 10 A éste oían atentamente todos, desde el más pequeño hasta el más grande, diciendo: Este es el gran poder de Dios. 11 Y le estaban atentos, porque con sus artes mágicas les había engañado mucho tiempo. 12 Pero cuando creyeron a Felipe, que anunciaba el evangelio del reino de Dios y el nombre de Jesucristo, se bautizaban hombres y mujeres.13 También creyó Simón mismo, y habiéndose bautizado, estaba siempre con Felipe; y viendo las señales y grandes milagros que se hacían, estaba atónito” Hechos 8: 9-13.
DEVOCIONAL POR JANETHE DISLA
CAMINANDO EN LA VERDAD
Hoy 11 de Noviembre
Libro de los Hechos-Capítulos 7-8
Los puntos sobresalientes en estos capítulos son: Discurso de Esteban, su Martirio, Saulo persigue a los Cristianos, el Evangelio es predicado en Samaria, Simón el adivino y Felipe el Etíope.
Hoy meditamos en Hechos 7:54-60 “Oyendo estas cosas, se enfurecían en sus corazones, y crujían los dientes contra él.55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios, 56 y dijo: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios. 57 Entonces ellos, dando grandes voces, se taparon los oídos, y arremetieron a una contra él. 58 Y echándole fuera de la ciudad, le apedrearon; y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven que se llamaba Saulo. 59 Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu. 60 Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les tomes en cuenta este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió.”
Lleno del Espíritu Santo, Esteban predicó la Palabra de Dios, de hecho no terminó su largo sermón. Esteban fue un testigo de la luz del mundo, pero sus oyentes, rehusaron ver su propia maldad, revelada por esta luz y para apagarla, apedrearon a Esteban hasta morir.
Pero las últimas palabras de Esteban fueron, Señor no les tomes en cuenta este pecado, él les amo, aunque le apedreaban, porque ellos estaban ciegos y no sabían lo que estaban haciendo.
Que bueno es cuando un hijo de Dios, perdona a otros, sus pecados y sus ofensas, y no guarda rencor en su corazón; debemos ser como Esteban; no importa lo que nos hagan, tenemos que tener un espíritu, y un corazón perdonador.
Entre toda esta multitud, que apedreaban a Esteban, se encontraba una persona hostil, un fariseo, llamado Saulo de Tarso, quien luego vino a ser el Apóstol Pablo.
Saulo consentía en la muerte de Esteban, porque era un Religioso que perseguía a Cristianos. Sin duda la Oración de Esteban tuvo tremenda influencia en los oyentes y sobre todo en Saulo.
Leemos Hechos 8: 1- 4 “Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles. 2 Y hombres piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran llanto sobre él. 3 Y Saulo asolaba la iglesia, y entrando casa por casa, arrastraba a hombres y a mujeres, y los entregaba en la cárcel.4 Pero los que fueron esparcidos iban por todas partes anunciando el evangelio. 5 Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo. 6 Y la gente, unánime, escuchaba atentamente las cosas que decía Felipe, oyendo y viendo las señales que hacía. 7 Porque de muchos que tenían espíritus inmundos, salían éstos dando grandes voces; y muchos paralíticos y cojos eran sanados; 8 así que había gran gozo en aquella ciudad.”
Es algo horrendo ver la luz de la Palabra de Dios y rechazarla, esto nos llevará a la condenación. Tenemos que ser sensibles a la Palabra y a la voz del Dios Poderoso. El creyente, que conoce la Palabra de Dios y al Dios de la Palabra, permanece fiel, aun cuando confronte el odio satánico de los que se oponen a la Verdad.
El dolor que sufrimos, cuando el mundo incrédulo nos apedrea, es poco si podemos guiar a alguien a Cristo. No tiene comparación el que una alma sea salva, y entregada a Cristo. Muchos quieren ver milagros espectaculares pero el milagro más grande es la salvación del alma humana: pasar de muerte a vida, de oscuridad a su luz admirable, del nacimiento físico al nacimiento espiritual, de condenados a justificados, de un hombre viejo contaminado a un hombre nuevo y santo, de los ídolos mudos a servir al Dios Vivo y Verdadero y de vivir en la concupiscencia de la carne a vivir en la voluntad de Dios del Espíritu Santo.
9 Pero había un hombre llamado Simón, que antes ejercía la magia en aquella ciudad, y había engañado a la gente de Samaria, haciéndose pasar por algún grande. 10 A éste oían atentamente todos, desde el más pequeño hasta el más grande, diciendo: Este es el gran poder de Dios. 11 Y le estaban atentos, porque con sus artes mágicas les había engañado mucho tiempo. 12 Pero cuando creyeron a Felipe, que anunciaba el evangelio del reino de Dios y el nombre de Jesucristo, se bautizaban hombres y mujeres.13 También creyó Simón mismo, y habiéndose bautizado, estaba siempre con Felipe; y viendo las señales y grandes milagros que se hacían, estaba atónito” Hechos 8: 9-13).
Oremos, como dice la Palabra, por lo que nos persiguen, y por aquellos que están en tinieblas, para que la Luz de la Palabra del Señor les alcance y los salve. Hagamos su Voluntad, todo el tiempo: No importa lo que nos digan, seamos como Esteban; “Señor, perdónales su pecado”, y que el tenga misericordia de salvar sus almas.
Recuerda: ¡SOLO EL CREYENTE, TIENE EL PRIVILEGIO DE VIVIR EN PAZ EN MEDIO DE LA TORMENTA!