
“Y amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente y con todas tus fuerzas. Este es el principal mandamiento. 31 Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. No hay otro mandamiento mayor que éstos.” Marcos 12:30-31.
DEVOCIONAL POR JANETHE DISLA
CAMINANDO EN LA VERDAD
Hoy 18 de octubre
Evangelio de Marcos-Capítulo 12-13
En estos capítulos vemos: La Historia de los Labradores malvados, el pago de impuestos a Cesar, preguntas sobre la resurrección, el mandamiento más grande, ofrenda de la viuda, y señales antes del fin.
Meditamos en Marcos 12:28-34 “28 Acercándose uno de los escribas, que los había oído disputar, y sabía que les había respondido bien, le preguntó: ¿Cuál es el primer mandamiento de todos? 29 Jesús le respondió: El primer mandamiento de todos es: Oye, Israel; el Señor nuestro Dios, el Señor uno es. Y amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente y con todas tus fuerzas. Este es el principal mandamiento. 31 Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. No hay otro mandamiento mayor que éstos 32 Entonces el escriba le dijo: Bien, Maestro, verdad has dicho, que uno es Dios, y no hay otro fuera de él; 33 y el amarle con todo el corazón, con todo el entendimiento, con toda el alma, y con todas las fuerzas, y amar al prójimo como a uno mismo, es más que todos los holocaustos y sacrificios. 34 Jesús entonces, viendo que había respondido sabiamente, le dijo: No estás lejos del reino de Dios. Y ya ninguno osaba preguntarle.”
¡No hay otro mandamiento, mayor que estos! Me pregunto, ¿habrá alguien en el mundo, que ame a Dios, como Él nos ama?.
El amor es la característica distintiva del creyente, del que ha Nacido de Nuevo y ha experimentado el Amor de Dios en su vida. No solo debemos amar a Dios con todo nuestro Ser, sino que tenemos que expresar amor sincero hacia otros, pues el amor es parte integral de la naturaleza de Dios que mora en cada cristiano.
Este amor cumple dos funciones en nuestras vidas; 1ro. Es la evidencia visible de que Cristo mora en nosotros. Yo no puedo amar, si no tengo a Dios en mi corazón, porque Dios es Amor, nos dice (1 Juan 4:8). Al expresar palabras, y realizar hechos de amor hacia otros; el Creyente se vuelve, el medio por el cual, el Dios invisible, se hace visible. 2do. Cuando practicamos el amor de Dios, se perfecciona en nosotros el Espíritu Santo que va creciendo en la vida del creyente, y tomando control en su mente, en su corazón y sus actitudes.
1 Juan 4:17 “En esto se ha perfeccionado el amor en nosotros, para que tengamos confianza en el día del juicio; pues como él es, así somos nosotros en este mundo.”
La dimensión y fuerza de nuestro amor a los demás, se da en proporción directa a la realidad de su Amor en nuestra vida. En la medida en que nos neguemos a amar a otros, en esa misma medida, rechazamos a nuestro Redentor Jesucristo..
Cuando los creyentes muramos a la carne dejando el orgullo y egoísmo (demandado sus derechos) amaran a los que no son fáciles de amar; incluso a los que los tratan en forma despectiva.
Que bendición sería si todos los creyentes siguiéramos al pie de la letra estos mandamientos: Nuestras familias serien llenas de amor, gozo, obediencia y disciplina;no existirían los gritos, enojos, frustraciones, mal humor, raíces de amargura, falta de perdón; Si verdaderamente amaramos a nuestro Creador y Redentor Jesucristo, nos amaramos de todo corazón los unos a los otros.
La influencia mundana es más poderosa en la vida del creyente muchas veces que la Palabra de Dios, aun Jesús dice a sus discípulos: “Y les decía en su doctrina: Guardaos de los escribas, que gustan de andar con largas ropas, y aman las salutaciones en las plazas, 39 y las primeras sillas en las sinagogas, y los primeros asientos en las cenas; 40 que devoran las casas de las viudas, y por pretexto hacen largas oraciones. Estos recibirán mayor condenación” (Marcos 12: 38-40).
Lamentablemente los hombres aman mas ser admirados por la gente, y los primeros lugares en todo, es mas la sociedad de influencia luciferina ha cambiado el mandamiento diciendo:!Amate a ti mismo, complácete en todo, sueña y alcanza tu sueño, tu eres el mejor eres tu líder, tu dios y si eres tu dios puedes hacer lo que quieras hasta cambiarte de sexo! ¡QUE MENTIRA LUCIFERINA! Los niños están creciendo bajo la monstruosidad del egocentrismo y totalmente contrario a la Palabra Poderosa de Dios.
Es hora de levantar nuestro ojos a nuestro HACEDOR que nos ama con amor eterno y nos amó primero 1 Juan 4:19 “Nosotros le amamos a él, porque él nos amó primero.”
¿Como cambiaría nuestro mundo, nuestra persona y familias si Determinamos en nuestro corazón obedecer a nuestro Dios? “Y amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente y con todas tus fuerzas. Este es el principal mandamiento. 31 Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. No hay otro mandamiento mayor que éstos.” (Marcos 12:30-31).
Recuerda: ¡ No podemos amar a nuestro prójimo,, ni a nosotros mismos SI primero no AMO A DIOS CON TODO MI SER!