
«Si, pues, habéis resucitado con CRISTO, buscad las cosas de arriba, donde está CRISTO sentado a la diestra de Dios. 2 Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra.3 Porque habéis muerto, y vuestra vida está escondida con CRISTO en Dios.4 Cuando CRISTO, vuestra vida, se manifieste, entonces vosotros también seréis manifestados con él en gloria.5 Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros: fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y avaricia, que es idolatría; 6 cosas por las cuales la ira de Dios viene sobre los hijos de desobediencia, 7 en las cuales vosotros también anduvisteis en otro tiempo cuando vivíais en ellas. 8 Pero ahora dejad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras deshonestas de vuestra boca.9 No mintáis los unos a los otros, habiéndoos despojado del viejo hombre con sus hechos, 10 y revestido del nuevo, el cual conforme a la imagen del que lo creó se va renovando hasta el conocimiento pleno, 11 donde no hay griego ni judío, circuncisión ni incircuncisión, bárbaro ni escita, siervo ni libre, sino que CRISTO es el todo, y en todos” Colosense 3:1-11.
DEVOCIONAL POR JANETHE DISLA

CAMINANDO EN LA VERDAD
Hoy 6 de diciembre
EPÍSTOLA A LOS COLOSENSES
La ciudad de Colosas estaba ubicada en el centro de Asia Menor. Epáfras y Timoteo fundaron iglesias en ese territorio y en las ciudades vecinas de Laodicea y Hierápolis, el apóstol Pablo nunca tuvo la oportunidad de visitar a los creyentes en esos lugares. Escribió a la Iglesia de Colosas entre el año 61 d.C. De los cuatro capítulos de la epístola a los Colosenses 9 % es profecía
Esta carta exalta la Preeminencia y Deidad de CRISTO: Da énfasis especial en la Relación de CRISTO con la Iglesia. ¡El es la cabeza y la Iglesia es el cuerpo! Pablo enfatiza, que como el Cuerpo físico, está sujeto al control de la cabeza, también el cuerpo de CRISTO-la Iglesia, debe, estar sujeta en todo a la Cabeza que es CRISTO
La vida cristiana no es un credo ni un sistema de doctrina; sino ! la Vida de CRISTO en nosotros!
El pensamiento clave de esta carta es: “Para que en todo JESUCRISTO tenga la Preeminencia” (Colosenses 1:18).
Leemos los Capítulos del 1-4
En estos Capítulos vemos: La Supremacía DE CRISTO, la Reconciliación EN CRISTO; Advertencia contra falsas enseñanzas, la Vida nueva en CRISTO, y Virtudes Cristianas.
Meditamos en Colosenses 2:8-15 “Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según CRISTO.9 Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad, 10 y vosotros estáis completos en él, que es la cabeza de todo principado y potestad. 11 En él también fuisteis circuncidados con circuncisión no hecha a mano, al echar de vosotros el cuerpo pecaminoso carnal, en la circuncisión de CRISTO; 12 sepultados con él en el bautismo, en el cual fuisteis también resucitados con él, mediante la fe en el poder de Dios que le levantó de los muertos. 13 Y a vosotros, estando muertos en pecados y en la incircuncisión de vuestra carne, os dio vida juntamente con él, perdonándoos todos los pecados, 14 anulando el acta de los decretos que había contra nosotros, que nos era contraria, quitándola de en medio y clavándola en la cruz, 15 y despojando a los principados y a las potestades, los exhibió públicamente, triunfando sobre ellos en la cruz.”
Pablo escribió la Epístola a los Colosenses después de recibir la visita de Epafras con el informe del progreso de los creyentes, pero también con la noticia de falsos maestros que estaban introduciendo falsas enseñanzas. Desde la celda de su prisión en Roma, escribió para refutar los errores del gnosticismo y el cristianismo judaizante; que es relevante también en nuestro tiempo, e inundando muchas iglesias cristianas; así que esto no es nuevo. Pablo enfáticamente advierte contra la corriente que lleva a los creyentes a estar bajo la ley ceremonial del Antiguo Testamento y la tradición judía que no honra a Dios sino sólo satisface el deseo religioso humano de la carne.
También la enseñanza gnóstica tipo “Nueva Era” de aquella época y que también está en boga en nuestros contornos, se había hecho presente en la iglesia a través de falsos maestros. Esta filosofía consiste en rigurosas disciplinas y la adoración a ángeles como mediadores entre Dios y el hombre. Esta herejía enseñaba que se puede alcanzar la perfección por el progreso que se logra a través de una serie de iniciaciones y niveles de experiencias místicas que dan acceso a esferas espirituales. Y que la mayoría de las personas que rechazan la Autoridad de CRISTO son engañadas por esta filosofía luciferina.
Pablo en lugar de rebatir este error punto por punto, demuestra enfáticamente que JESUCRISTO es el Creador y Sustentador del Universo, el redentor de los pecadores, y la Cabeza de la Iglesia. “Por tanto, nadie os juzgue en comida o en bebida, o en cuanto a días de fiesta, luna nueva o días de reposo,[a], 17 todo lo cual es sombra de lo que ha de venir; pero el cuerpo es de CRISTO. 18 Nadie os prive de vuestro premio, afectando humildad y culto a los ángeles, entremetiéndose en lo que no ha visto, vanamente hinchado por su propia mente carnal, 19 y no asiéndose de la Cabeza, en virtud de quien todo el cuerpo, nutriéndose y uniéndose por las coyunturas y ligamentos, crece con el crecimiento que da Dios. 20 Pues si habéis muerto con CRISTO en cuanto a los rudimentos del mundo, ¿por qué, como si vivieseis en el mundo, os sometéis a preceptos 21 tales como: No manejes, ni gustes, ni aun toques 22 (en conformidad a mandamientos y doctrinas de hombres), cosas que todas se destruyen con el uso? 23 Tales cosas tienen a la verdad cierta reputación de sabiduría en culto voluntario, en humildad y en duro trato del cuerpo; pero no tienen valor alguno contra los apetitos de la carne. ( Colosenses 2: 16-23)
Para no dejarnos engañar ni confundir por filosofías y psicologías humanas muy atractivas para persuadir y apartarnos sutilmente de la Palabra de Verdad es que Pablo nos hace ver la posición verdaderamente exaltada del creyente en CRISTO; El ESPÍRITU SANTO, hizo escribir al Apóstol Pablo; “que la Palabra de Dios”, more en abundancia en vosotros, (Colosenses 3:16).
Tenemos que examinarnos, y si somos de CRISTO busquemos las cosas de arriba: «Si, pues, habéis resucitado con CRISTO, buscad las cosas de arriba, donde está CRISTO sentado a la diestra de Dios. 2 Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra.3 Porque habéis muerto, y vuestra vida está escondida con CRISTO en Dios. 4 Cuando CRISTO, vuestra vida, se manifieste, entonces vosotros también seréis manifestados con él en gloria.5 Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros: fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y avaricia, que es idolatría; 6 cosas por las cuales la ira de Dios viene sobre los hijos de desobediencia, 7 en las cuales vosotros también anduvisteis en otro tiempo cuando vivíais en ellas. 8 Pero ahora dejad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras deshonestas de vuestra boca.9 No mintáis los unos a los otros, habiéndoos despojado del viejo hombre con sus hechos, 10 y revestido del nuevo, el cual conforme a la imagen del que lo creó se va renovando hasta el conocimiento pleno, 11 donde no hay griego ni judío, circuncisión ni incircuncisión, bárbaro ni escita, siervo ni libre, sino que CRISTO es el todo, y en todos” (Colosense 3:1-11).
Recuerda: ¡NUNCA SERÁ ENGAÑADO, EL QUE VIVE EN LA PALABRA VIVIENTE «JESUCRISTO»!