2 Pedro 3:9-18 9”El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento. 10 Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche; en el cual los cielos pasarán con grande estruendo, y los elementos ardiendo serán deshechos, y la tierra y las obras que en ella hay serán quemadas.11 Puesto que todas estas cosas han de ser deshechas, ¡cómo no debéis vosotros andar en santa y piadosa manera de vivir,12 esperando y apresurándoos para la venida del día de Dios, en el cual los cielos, encendiéndose, serán deshechos, y los elementos, siendo quemados, se fundirán!13 Pero nosotros esperamos, según sus promesas, cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la justicia.14 Por lo cual, oh amados, estando en espera de estas cosas, procurad con diligencia ser hallados por él sin mancha e irreprensibles, en paz.15 Y tened entendido que la paciencia de nuestro Señor es para SALVACIÓN; como también nuestro amado hermano Pablo, según la sabiduría que le ha sido dada, os ha escrito, 16 casi en todas sus epístolas, hablando en ellas de estas cosas; entre las cuales hay algunas difíciles de entender, las cuales los indoctos e inconstantes tuercen, como también las otras Escrituras, para su propia perdición. 17 Así que vosotros, oh amados, sabiéndolo de antemano, guardaos, no sea que arrastrados por el error de los inicuos, caigáis de vuestra firmeza. 18 Antes bien, CRECED EN LA GRACIA y el CONOCIMIENTO DE NUESTRO SEÑOR Y SALVADOR JESUCRISTO. A él sea gloria ahora y hasta el día de la eternidad. Amén.”
DEVOCIONAL POR JANETHE DISLA
CAMINANDO EN LA VERDAD
Hoy 19 de Diciembre
Lectura de la Carta 2 Pedro Capítulos 1-3
La segunda carta del apóstol Pedro fue escrita poco antes de sufrir el martirio por la gran persecución a los cristianos por el emperador Nerón.
Pedro exhorta a sus lectores a que practiquen la vida espiritual y les recuerda que Dios, por su divino poder, ha provisto “todas las cosas que pertenecen a la vida y la piedad”
También exhorta a los creyentes a mantenerse firmes en el verdadero conocimiento inamovible de la Palabra de Dios. Para poder rechazar las falsas enseñanzas, doctrinas y “herejías destructoras” que introducirán maestros impíos en la Iglesia.
Pedro también refuta los argumentos de aquellos que niegan la segunda venida de nuestro Señor Jesucristo. Ahora mismo, como ocurrió en el tiempo que se escribió esta epístola, muchos aún preguntan: “¿Dónde está la promesa de su advenimiento?” (3:4), e insisten en que el tiempo sigue simplemente su curso desde el principio de la creación.
La segunda carta de Pedro se escribió en el año 63 d.C. y tiene 3 capítulos de los cuales 41% es profecía.
El versículo clave es 2 Pedro 1:19 “Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones;”
Damos lectura a los 3 capítulos de la epístola.
Estos capítulos nos hablan de: La Gracia múltiple de Dios, Falsos maestros y la certeza de la venida de Cristo.
Meditamos hoy en 2 Pedro 3:14-15 “Por lo cual, oh amados, estando en espera de estas cosas, procurad con diligencia ser hallados por él sin mancha e irreprensibles, en paz. 15 Y tened entendido que la paciencia de nuestro Señor es para salvación; como también nuestro amado hermano Pablo, según la sabiduría que le ha sido dada, os ha escrito”.
Desde el tiempo, entre la ascensión de Cristo y su regreso, que los creyentes estamos esperando; los incrédulos del mundo, continúan en sus concupiscencias.
Es decir, deleitándose en el pecado, viviendo lejos de Dios y de sus ordenanzas. Piensan que la tardanza de Cristo, prueba que Él no volverá, nos dice 2 Pedro 3:3-9 “sabiendo primero esto, que en los postreros días vendrán burladores, andando según sus propias concupiscencias, 4 y diciendo: ¿Dónde está la promesa de su advenimiento? Porque desde el día en que los padres durmieron, todas las cosas permanecen así como desde el principio de la creación. 5 Estos ignoran voluntariamente, que en el tiempo antiguo fueron hechos por la palabra de Dios los cielos, y también la tierra, que proviene del agua y por el agua subsiste, 6 por lo cual el mundo de entonces pereció anegado en agua; 7 pero los cielos y la tierra que existen ahora, están reservados por la misma palabra, guardados para el fuego en el día del juicio y de la perdición de los hombres impíos. 8 Mas, oh amados, no ignoréis esto: que para con el Señor un día es como mil años, y mil años como un día. 9 El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento”.
¡Gracias Dios, eres maravilloso!. El Eterno Dios nuestro creador, sabe a dónde va, la persona que muere sin Cristo, a un tormento eterno, es decir de allá no va a salir nunca. Es por eso que el Señor, Jesucristo pagó el precio del pecado con su sangre perfecta, para volvernos al Padre y presentarnos santos. Así que está esperando pacientemente a que todos vengan al conocimiento de Él, de la Poderosa Palabra de Dios, para ser lavados, limpiados y restaurados a una relación personal, con el Dios Viviente. Pero nosotros como creyentes, estamos preparados para recibirle en cualquier momento; ya que nos ha hecho partícipes de su naturaleza divina.
2 Pedro 3:9-18 9”El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento. 10 Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche; en el cual los cielos pasarán con grande estruendo, y los elementos ardiendo serán deshechos, y la tierra y las obras que en ella hay serán quemadas.11 Puesto que todas estas cosas han de ser deshechas, ¡cómo no debéis vosotros andar en santa y piadosa manera de vivir,12 esperando y apresurándoos para la venida del día de Dios, en el cual los cielos, encendiéndose, serán deshechos, y los elementos, siendo quemados, se fundirán! 13 Pero nosotros esperamos, según sus promesas, cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la justicia. 14 Por lo cual, oh amados, estando en espera de estas cosas, procurad con diligencia ser hallados por él sin mancha e irreprensibles, en paz. 15 Y tened entendido que la paciencia de nuestro Señor es para salvación; como también nuestro amado hermano Pablo, según la sabiduría que le ha sido dada, os ha escrito, 16 casi en todas sus epístolas, hablando en ellas de estas cosas; entre las cuales hay algunas difíciles de entender, las cuales los indoctos e inconstantes tuercen, como también las otras Escrituras, para su propia perdición. 17 Así que vosotros, oh amados, sabiéndolo de antemano, guardaos, no sea que arrastrados por el error de los inicuos, caigáis de vuestra firmeza. 18 Antes bien, creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A él sea gloria ahora y hasta el día de la eternidad. Amén.”
