CARTAS A TITO Capítulos 1-3 Y FILEMÓN Capítulo 1

TITO CAPÍTULO 1
TITO CAPÍTULO 2
TITO CAPÍTULO 3
FILEMÓN
12/11/2024

CAMINANDO EN LA VERDAD

Hoy 11 de diciembre

CARTAS A TITO Y FILEMÓN

El apóstol Pablo escribe esta carta a Tito, que era probablemente un gentil de Macedonia a quien Pablo llevó a Cristo y dejó en Greta. Pablo escribió esta misiva a Tito entre el primero y el segundo encarcelamiento en Roma, entre los años 63 y 65 d.C. de sus tres capítulos 2% es profecía. En la carta el apóstol señala, normas morales y espirituales para el creyente, hace énfasis a los ancianos piadosos de la Iglesia; estos deben ser sin mancha en el hogar, en su vida personal, y también deben ser fieles a la Palabra del Señor.

Puesto que hay muchos habladores de vanidades y engañadores, enseñando por ganancia deshonesta, lo que no conviene. Los siervos del Señor deben ser modelos para los demás creyentes, capaces de aprender las artimañas del error y las falsas doctrinas.

El versículo clave lo encontramos en Tito 2: 1 “Pero tú habla lo que está de acuerdo con la sana doctrina.”

También Pablo escribe a Filemón, y es una de las cuatro epístolas dirigidas a una persona y no a una iglesia. Las otras son 1 y 2 Timoteo y Tito. Escrita durante su primer encarcelamiento en Roma entre los años 60-61 d.C. En esta misiva hace énfasis al amor y el perdón de Filemón para con su esclavo, Onésimo que había huido a Roma, donde entró en contacto con el apóstol Pablo, que estaba preso, le compartió el Evangelio, se arrepintió y convirtió a Cristo.

Pablo lo envió de regreso a Filemón con esta carta, en la que Pablo le pide que perdone a Onésimo, que significa “útil” y que le de la bienvenida como hermano en Cristo. Jesucristo ha unido en Él a todo creyente, creando así, una fraternidad espiritual, que hace que amo y esclavo, reconozcan que son UNO EN CRISTO.

El versículo clave es: “porque oigo del amor y de la fe que tienes hacia el Señor Jesús, y para con todos los santos” (Filemón 1:5). !Así sea, nuestro testimonio como el de Filemón!

Damos lectura a los capítulos 1-3 de Tito y Capítulo 1 de Filemón.

Los puntos sobresalientes en estas dos cartas son: Requisitos para los oficiales de la Iglesia, Advertencia contra los falsos maestros, la conducta cristiana y apelación de Pablo por Onésimo.

Meditamos hoy en Tito 3:1-7 “Recuérdales que se sujeten a los gobernantes y autoridades, que obedezcan, que estén dispuestos a toda buena obra. 2 Que a nadie difamen, que no sean pendencieros, sino amables, mostrando toda mansedumbre para con todos los hombres3 Porque nosotros también éramos en otro tiempo insensatos, rebeldes, extraviados, esclavos de concupiscencias y deleites diversos, viviendo en malicia y envidia, aborrecibles, y aborreciéndonos unos a otros. 4 Pero cuando se manifestó la bondad de Dios nuestro Salvador, y su amor para con los hombres, 5 nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo, 6 el cual derramó en nosotros abundantemente por Jesucristo nuestro Salvador, 7 para que justificados por su gracia, viniésemos a ser herederos conforme a la esperanza de la vida eterna.”

En ninguna parte, se reconoce ni a Dios y ni a su Palabra como autoridad suprema; se menosprecia la vida, la ley y el orden. Satanás engañó a Eva haciéndo que comiera la fruta prohibida en el Edén infectando todas las generaciones hasta nuestros días. El ser humano ha sido contaminado por el pecado y se opone con rebeldía infundada a la autoridad de Dios; provocando violencia, rebelión y desobediencia.

Pero la Iglesia del Redentor Jesucristo debe ser diferente y Pablo escribe a Tito con estrictas ordenanzas, que se deben poner en práctica: 5 Por esta causa te dejé en Creta, para que corrigieses lo deficiente, y establecieses ancianos en cada ciudad, así como yo te mandé; 6 el que fuere irreprensible, marido de una sola mujer, y tenga hijos creyentes que no estén acusados de disolución ni de rebeldía.7 Porque es necesario que el obispo sea irreprensible, como administrador de Dios; no soberbio, no iracundo, no dado al vino, no pendenciero, no codicioso de ganancias deshonestas, 8 sino hospedador, amante de lo bueno, sobrio, justo, santo, dueño de sí mismo, 9 retenedor de la palabra fiel tal como ha sido enseñada, para que también pueda exhortar con sana enseñanza y convencer a los que contradicen” ( Tito 1:5-9).

Si algún oficial es incompetente, o existe corrupción en el gobierno; hay procesos legales, para efectuar cambios; pero si toda la nación esta corrupta, la violencia nunca es el método de Dios, para producir los cambios necesarios. Solo Jesucristo, transforma el corazón humano, puesto que todos hemos pecado, todos producimos pecado.

Nos dice: Tito 1:13-16 “Este testimonio es verdadero; por tanto, repréndelos duramente, para que sean sanos en la fe, 14 no atendiendo a fábulas judaicas, ni a mandamientos de hombres que se apartan de la verdad. 15 Todas las cosas son puras para los puros, mas para los corrompidos e incrédulos nada les es puro; pues hasta su mente y su conciencia están corrompidas. 16 Profesan conocer a Dios, pero con los hechos lo niegan, siendo abominables y rebeldes, reprobados en cuanto a toda buena obra.”

El creyente, que vive en santidad, no tiene derecho a escoger cuales leyes obedecer o cuales desobedecer. Tenemos que obedecer toda la Palabra de Dios. Porque la gracia de Dios se ha manifestado para salvación a todos los hombres, 12 enseñándonos que, renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, vivamos en este siglo sobria, justa y piadosamente, 13 aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo,14 quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras.15 Esto habla, y exhorta y reprende con toda autoridad. Nadie te menosprecie” (Tito 2:11-15).

¡Solo disfrutan de Paz en su corazón, aquellos que con Gozo se someten al Único Dios Viviente JESUCRISTO y Su PALABRA! ¡Recuérdalo Siempre!

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