53 Terminada la travesía, vinieron a tierra de Genesaret, y arribaron a la orilla. 54 Y saliendo ellos de la barca, en seguida la gente le conoció. 55 Y recorriendo toda la tierra de alrededor, comenzaron a traer de todas partes enfermos en lechos, a donde oían que estaba. 56 Y dondequiera que entraba, en aldeas, ciudades o campos, ponían en las calles a los que estaban enfermos, y le rogaban que les dejase tocar siquiera el borde de su manto; y todos los que le tocaban quedaban sanos” Marcos 6: 53-56.
DEVOCIONAL POR JANETHE DISLA
CAMINANDO EN LA VERDAD
Hoy 15 de octubre
Evangelio de Marcos Capítulos 6-7
Los puntos importantes son: Jesús en Nazaret, los 12 Apóstoles son enviados a predicar a los hombres el arrepentimiento, Juan el Bautista es decapitado, alimentación de los cinco mil, Jesús camina sobre las aguas, Jesús amonesta a los Fariseos y la Fe de la mujer Siro fenicia.
Meditamos hoy en Marcos 7:5-7 y 21-23 “Le preguntaron, pues, los fariseos y los escribas: ¿Por qué tus discípulos no andan conforme a la tradición de los ancianos, sino que comen pan con manos inmundas? 6 Respondiendo él, les dijo: Hipócritas, bien profetizó de vosotros Isaías, como está escrito: Este pueblo de labios me honra, Mas su corazón está lejos de mí. 7 Pues en vano me honran, Enseñando como doctrinas mandamientos de hombres. Porque de dentro, del corazón de los hombres, salen los malos pensamientos, los adulterios, las fornicaciones, los homicidios, 22 los hurtos, las avaricias, las maldades, el engaño, la lascivia, la envidia, la maledicencia, la soberbia, la insensatez. 23 Todas estas maldades de dentro salen, y contaminan al hombre”.
Nos engañamos a nosotros mismos, cuando creemos que no hay daño en los pensamientos malignos que no se expresan, pues el hombre “Porque cual es su pensamiento en su corazón, tal es él… (Proverbios 23:7ª)
El Señor, describió a toda la raza humana, con virus en el corazón; o sea que no hay nada bueno. La Palabra de Dios, dice que no hay ni uno que busque a Dios, no hay ni uno bueno. “10 Como está escrito: No hay justo, ni aun uno; 11 No hay quien entienda, No hay quien busque a Dios. 12 Todos se desviaron, a una se hicieron inútiles; No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno” ( Romanos 3:10-12).
Cristo amonestó seriamente, el engaño, el orgullo, la avaricia que hay en el corazón y que son estos virus los que contaminan al Ser Humano, tanto como los adulterios, y los homicidios. Son las pestes y las enfermedades que contaminan nuestro cuerpo, es verdad, pero lo que más contaminan, son las cosas que tenemos bien guardadas en nuestro corazón; el orgullo, la falta de perdón, la avaricia, codicia, todo eso, está en el fondo de nuestros corazones. A Dios no le puedes ocultar nada, sabe aun los pecados más íntimos y secretos.
Aunque tímidamente la gente reconoce que es pecadora; piensan que son más buenos mediante las buenas obras que hacen y no se dejan curar por el poder de Jesucristo que busca llenarlos de una nueva naturaleza espiritual. No creer a la Palabra sanadora, nos vuelve incrédulos; esto le paso a Jesús en su ciudad y con su misma familia.
Nos dice Marcos 6: 1-6 “Salió Jesús de allí y vino a su tierra, y le seguían sus discípulos. 2 Y llegado el día de reposo,[a] comenzó a enseñar en la sinagoga; y muchos, oyéndole, se admiraban, y decían: ¿De dónde tiene éste estas cosas? ¿Y qué sabiduría es esta que le es dada, y estos milagros que por sus manos son hechos? 3 ¿No es este el carpintero, hijo de María, hermano de Jacobo, de José, de Judas y de Simón? ¿No están también aquí con nosotros sus hermanas? Y se escandalizaban de él. 4 Mas Jesús les decía: No hay profeta sin honra sino en su propia tierra, y entre sus parientes, y en su casa. 5 Y no pudo hacer allí ningún milagro, salvo que sanó a unos pocos enfermos, poniendo sobre ellos las manos. 6 Y estaba asombrado de la incredulidad de ellos. Y recorría las aldeas de alrededor, enseñando.”
El Dios Eterno Jesucristo llegó a su pueblo a cumplir la profecía escrita por los profetas 700 años antes; sin embargo seguramente por el trajín de la vida se desconectaron de las profecías y se olvidaron, o al pasar los años se cansaron de esperar. Jesucristo el Mesías esperado llegó y pasó desapercibido y menos apreciado. Lo vieron como cualquier persona, no era hijo de un principal, ni de un sacerdote, ni de un escriba; así la gente lo hubiera escuchado por su jerarquía.
Era el hijo de un simple carpintero y de María una mujer temerosa del Eterno Dios que halló gracia ante sus ojos para ser elegida como la madre del Mesías profetizado. También José y María como cualquier matrimonio tuvieron otros hijos e hijas los cuales eran bien conocidos en Nazaret; por ello sus vecinos y pueblo en general fueron dominados por la incredulidad.
Cuántos viven así hoy en día no quieren humillarse ante el Nazareno que fue rechazado por su pueblo, que vino a mostrar que el problema del ser humano no es externo, sino interno.
Jesucristo llegó a Genesaret donde todos querían conocerlo:53 Terminada la travesía, vinieron a tierra de Genesaret, y arribaron a la orilla. 54 Y saliendo ellos de la barca, en seguida la gente le conoció. 55 Y recorriendo toda la tierra de alrededor, comenzaron a traer de todas partes enfermos en lechos, a donde oían que estaba. 56 Y dondequiera que entraba, en aldeas, ciudades o campos, ponían en las calles a los que estaban enfermos, y le rogaban que les dejase tocar siquiera el borde de su manto; y todos los que le tocaban quedaban sanos” Marcos 6: 53-56.
¡A fin de que nuestras vidas, sean una expresión práctica del Espíritu Santo que mora en nosotros. Tenemos nuestra responsabilidad de guardar nuestro corazón con toda diligencia ya que es del Eterno Dios Jesucristo! ¡Recuérdalo Siempre!
