
2 Timoteo 1:7-9 7 Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.8 Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni de mí, preso suyo, sino participa de las aflicciones por el evangelio según el poder de Dios,9 quien nos salvó y llamó con llamamiento santo, no conforme a nuestras obras, sino según el propósito suyo y la gracia que nos fue dada en Cristo Jesús antes de los tiempos de los siglos,
DEVOCIONAL POR JANETHE DISLA
CAMINANDO EN LA VERDAD
Hoy 10 de diciembre
SEGUNDA CARTA DE PABLO A TIMOTEO
Pablo escribe su segunda misiva a Timoteo desde la celda de la cárcel en Roma, poco antes de ser martirizado alrededor del año 67 d.C. Esta segunda carta consta de cuatro capítulos de los cuales 20% es profecía y registra las últimas palabras del apóstol Pablo que la inspiración divina ha preservado.
Se cree que antes de escribir esta epístola Pablo fue arrestado una vez más, llevado de vuelta a Roma y puesto en prisión. Pablo percibió que su muerte estaba próxima debido a que el emperador Nerón había iniciado una persecución sistemática contra los cristianos.
Pablo estaba consciente y satisfecho de terminar la carrera que su Señor le había delineado y de haber sufrido como “Su instrumento escogido” llevando la Palabra libertadora a reyes, autoridades y a todos en su camino.
Con ánimo puesto Pablo alienta a Timoteo su hijo en la fe a: Ser un buen soldado de Jesucristo, a oponerse a la falsa doctrina y refutar los errores, a ser un modelo de virtud espiritual y un fiel predicador del evangelio.
Versículo clave: 1 Timoteo 3:16 “Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia,”
Leemos los capítulos 1-4 Allí los puntos principales son: Exhortación a Timoteo, la Apostasía venidera, Firmeza en las escrituras y el encargo de predicar la Palabra no adulterada.
Meditamos hoy en 2 Timoteo 3:12-17 “Y también todos los que quieren vivir piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución; 13 mas los malos hombres y los engañadores irán de mal en peor, engañando y siendo engañados. Pero persiste tú en lo que has aprendido y te persuadiste, sabiendo de quién has aprendido; 15 y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús. Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, 17 a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra”.
Solo la Biblia puede preparar, a un creyente, para que sea aprobado, para toda buena obra y equiparlo para hacer la voluntad de Dios. Para poder entender la Palabra de Dios, primeramente tenemos que venir al Autor del Escrito; para que nos capacite y la podamos entender. ¿Cómo se logra esto?, cuando nos arrepentimos de nuestros pecados y recibimos la vida de Jesucristo como Señor y Salvador; y el Poder del Espíritu Santo, somos capacitados para comprender espiritualmente la Sagrada Palabra de Dios.
Así, que cualquier persona de cualquier religión, credo, lengua o nacionalidad, no importando su estatus social, que venga a CRISTO y reciba el ESPÍRITU SANTO, será capacitado para poder entender, vivir y obedecer la Palabra de Dios.
Si quieres crecer espiritualmente y ser un creyente maduro, tendrás que invertir tu tiempo y escudriñar la Palabra de Dios. Empleamos varios años para obtener un diploma por nuestra vocación; pero cuando no dedicamos tiempo para leer la Palabra de Dios, estamos diciendo que alcanzar bienes materiales, es más importante para nosotros que agradar a DIOS. El Señor nos manda a los creyentes a compartir Su Palabra, por eso ésta debe morar en abundancia en nuestro corazón.
2 Timoteo 4: 1-8 “Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, que juzgará a los vivos y a los muertos en su manifestación y en su reino, 2 que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina.3 Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias, 4 y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas. 5 Pero tú sé sobrio en todo, soporta las aflicciones, haz obra de evangelista, cumple tu ministerio. 6 Porque yo ya estoy para ser sacrificado, y el tiempo de mi partida está cercano. 7 He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe. 8 Por lo demás, me está guardada la corona de justicia, la cual me dará el Señor, juez justo, en aquel día; y no solo a mí, sino también a todos los que aman su venida.”
Hay recompensa para los obreros fieles, que amamos Su Regreso y compartimos la Palabra de transformación. Debemos leer la Biblia para estar preparados y no dejarnos engañar. Ya que en la Era de la Iglesia siempre habrá apóstatas y falsa doctrina; y con el paso del tiempo se va incrementando.
2 Timoteo 3: 1-5 “También debes saber esto: que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos. 2 Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos, 3 sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes, crueles, aborrecedores de lo bueno, 4 traidores, impetuosos, infatuados, amadores de los deleites más que de Dios, 5 que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a éstos evita.”
No hay duda que estamos viviendo en tiempos peligrosos para la Iglesia de Cristo y el apóstol Pablo nos dejó estas advertencias, que hombres con características mundanas se iban a infiltrar en la Iglesia; y la enseñanza a los verdaderos creyentes es “a estos evita”
2 Timoteo 1:7-9 7 Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio. 8 Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni de mí, preso suyo, sino participa de las aflicciones por el evangelio según el poder de Dios, 9 quien nos salvó y llamó con llamamiento santo, no conforme a nuestras obras, sino según el propósito suyo y la gracia que nos fue dada en Cristo Jesús antes de los tiempos de los siglos,
Recuerda: ¡LOS QUE VIVIMOS EN CRISTO, ESTAMOS LLAMADOS A PROCLAMAR SU PALABRA DE SALVACIÓN ETERNA!